"¿Para qué sirve el Arte? Para darnos la breve pero fulgurante ilusión de la camelia, abriendo en el tiempo una brecha emocional que parece irreductible a la lógica animal. ¿Cómo surge el Arte? Nace de la capacidad que tiene la mente de esculpir el ámbito sensorial. ¿Qué hace el Arte por nosotros? Da forma y hace visibles nuestras emociones y, al hacerlo, les atribuye este sello de eternidad que llevan todas las obras que, a través de una forma particular, saben encarnar el universo de los afectos humanos.
El sello de la eternidad... ¿Qué vida ausente sugieren a nuestro corazón estos manjares, estas copas, estos tapices y estos vasos? Más allá de los límites del cuadro, sin duda, el tumulto y el tedio de la vida, esa carrera incesante y vana acosada de proyectos; pero en el interior, la plenitud de un momento en suspenso arrancado de la codicia humana."
(Muriel Barbery, L'Élégance du hérisson, Gallimard, 2006)
No hay comentarios:
Publicar un comentario